miércoles, 17 de febrero de 2010

Zapateando, ep-demo de halahaches


Halahaches, proyecto de raíz folklórica y a base de guitarras de palo, cuerdas vocales y percusión liderado por Lucas Halahaches y que incluye a distintos colaboradores en el camino.

he acá el primer ep-demo descargable totalmente gratis y fácil de conseguir.

descargar aquí: http://www.megaupload.com/?d=HTP2827F


escuche y difunda.....

viernes, 10 de abril de 2009

aidentro!


estaba ahí dentro, palpitando, sonando entre rincones perdidos e ignorados.


ahora está acá, conmigo, saliendo, viendo y cantando, mirando cerros y oliendo pasas y tiera.


caminemos y seamos felices ahora.

martes, 9 de diciembre de 2008

maldiciòn


¿eres tù, demonio maldito del pasado en llamas?

¿es el contorno de tu piel frígida y cortante lo que parece congelar los peldaños de ésta escalera y me hace bajar a una realidad sepultada?

¿eres tù quien me mira desde lejos, con sonrisa burlona y el color màs oscuro en los ojos?

¿es tu presencia la que siento clavarme la piel y agujerearme las venas con un dolor que ya creía haber olvidado?

¿es tu silueta la que me golpea entre la luz y la asquerosa sorpresa?

¿eres tù... eres tù quien me intercepta y me derrumba?

¿son tus palabras secas y mudas, acaso, las que viajan por redes inexistentes y desarman el orden del hastìo?

¿eres tù, demonio horripilante, quien me mira, rìe y da vuelta la cara sonriendo de forma infame para seguir su camino dejàndome temblando de asco y horror?


eres tù, ah?!


pues si es asì, te maldigo, con fuerza viceral, te maldigo!!!

sábado, 6 de diciembre de 2008

subiendo


de pronto tuve una extraña sensación, me vi en un auto, uno viejo, un ford o un renault tal vez, con asientos de cuero, sin cinturón de seguridad, con el pelo flotando y mis ojos negros rompiendo el retrovisor. iba a toda velocidad pasando a través de la luz y el polvo por una carretera del norte, o quizás una ruta peruana, y los autos opacos y oxidados se iban quedando atrás porque el mío era más veloz, más potente y patón. Yo los veía pasar con gusto y riendo por dentro. del otro lado de la carretera caliente venían más autos, como truenos salvajes y perdidos, o algo así. las ventanas estaban abiertas y el aire entraba tibio, fogoso, y golpeaba mi cara. la música salía quemante y abofeteaba mis brazos y mi pie le daba con más fuerza al acelerador. Todo era como un torbellino de adrenalina, pasión y sonidos en remolino. ahí vino lo extraño, sentí ganas de soltar el volante, poner mis manos en mi nuca, recostarme y abrir los ojos sonriente, con placer, y dejar que el auto siguiese solo, desbocado, para ver si avanzaba o si chocaba contra uno de los truenos, contra un poste perdido y solitario, si iba a dar a las rocas saladas o lo que fuese, todo con tal de hacerme trizas y sentir el impacto brutal y, quién sabe, final. por suerte no tengo auto, no sé manejar y nunca he ido al norte, menos al Perú. eso fue lo extraño, la sensación de vértigo lejano. le subí el volumen a la radio y seguí conduciendo.

lunes, 17 de noviembre de 2008

sinceramente....

aparece desde lo más profundo de mi esencia, desde el centro mismo de la putrefacción. es lo único que puedo entregar, lo único que sale al sol y se seca y se hace polvo y desazón. es venganza, es envidia, es animadversión, es tedio, soy yo.

lo más rancio de mi corazón anda dando vueltas por aquí y se queda prendido a los ojos; ronda en los pasillos y se cuela en los oídos y reseca las bocas. tengo todo lo que no quieren, pero lo entrego de todas formas. todos lo reciben en sus manos, cada cual ve lo que hace con eso. por mi parte, es lo mejor que sé hacer: entregar miseria y razones poco perdurables, y deambular como si nada, con los zapatos sucios y el pelo a medio crecer, chocando con las paredes y esparciendo el hedor a sin sentido y tristeza falsa.

lunes, 3 de noviembre de 2008

pe jota

estás en todos lados, a cada instante. eres como un reflejo de lo absoluto entrando por mi retina y pegandose en mi paladar por efectos perdidos. cada vez que abro los ojos te veo. al cerrarlos apareces flotando y te quedas ahí, frente a mí, a mi lado, detrás y arriba, como bola de espejos, girando en mi cabeza. tu voz me envuelve y me lanza lejos, hasta donde pueda encontrarme el rastro de tu resplendor. nunca me voy a despegar de tu maravillosa magia opaca, ni de tus movimientos y vueltas decadentes al abismo de mi amor. hoy estás gigante y luminosa, como luna llena sobre el desierto. ven por mí.

miércoles, 27 de agosto de 2008

disfunción



En mi casa nada funciona bien, todo a medias, o simplemente no anda. Nunca van a encontrar algo que se conserve en buenas condiciones, ya sea la tele de mi hermana que no tiene botones para cambiar de canal y hay que hacer contacto con los sensores metiendo los dedos y presionar un interruptor, cosa que simplemente (o normalmente) se logra con los botoncitos que le faltan; o la tele de mis viejos, la cual, la mayoría del tiempo, carece de sonido y hay que golpearla para tratar de que la pantalla muestre algo, y si esto se logra, se va el sonido y ahí comienza otra batalla por tratar de perder el tiempo frente a algo, tiempo que se va intentando revivir el artefacto. También pueden tomar el caso del computador que, de partida, tiene una memoria enana, los programas están a medio instalar, y para colmo windows nunca se puede cerrar decentemente y hay que recurrir a la vieja triquiñuela del Cont+Alt+Supr, y en el peor de los casos reiniciarlo de la forma más brutal: desenchufando el tarro y prendiéndolo otra vez hasta encontrar un error en el sistema y así poder utilizarlo (de alguna forma). Otro caso es el de la estufa a gas, la cual carece de una de las rueditas en su base, entonces es difícil transportarla de una pieza a otra y hay que poner un cenicero para poder equilibrarla y no quemarnos en el intento de calefaccionar la casa. Consideren también el calefont que funciona a medias, es decir, puede calentar el agua tanto que esta llega a quemar la piel tanto como puede ignorar el hecho de estar encendido y no calentar para nada. Imagínense lo que es ducharse en tales condiciones en invierno. ¡Para qué hablar del hervidor de agua! Uno mismo tiene que mantener presionado el botoncito que lo activa hasta que el agua hierva y salga humito, porque de lo contrario el botoncito se devuelve y no hay agüita para el té, o sea, uno se convierte en un accesorio externo más para el funcionamiento de un simple hervidor de agua. Pero sigamos con el listado y vayamos a la puerta del mueble de la radio, la cual nunca se mantiene cerrada y hay que utilizar papeles doblados cumpliendo la función de seguros o topes para que la puerta no se abra a diestra y siniestra. Siguiendo en el mismo lugar tenemos el propio equipo de música, el cual no funciona si hay muchas luces encendidas pues le hace falta voltaje y no toca los CD’s. Si seguimos en dirección al baño se encontrarán con la ducha teléfono que a veces (muchas, muchas veces) se desarma debido a la presión del agua, lo cual suele suceder mientras uno se da una limpia ducha. En la misma senda tenemos la llave del agua fría de la cocina que, de hecho, no existe y hay que alternar la perilla del agua caliente poniéndola en el lugar que debiese ocupar la manilla del agua fría. Pero quedémonos en la cocina, pues ahí yace la prueba más contundente de la mala planificación, el gran acierto de instalar un extractor de vapor en la cocina sin existir una salida para tal vapor, lo cual hace que éste nunca salga de la cocina. Pero esto es peor de lo que parece, ya que el extractor lleva ahí más de dos años y nadie se ha dignado a idear una forma de colar el vapor y expulsarlo del lugar (ni siquiera el que escribe). Digamos que en mi pieza también encontramos elementos defectuosos, como la cassetera de mi equipo de música. Esta se come las cintas de cualquier cassette, sin hacer distinción entre cassettes originales o piratas y no deja escuchar la música polvorienta. Otra cosa son las paredes de la casa que se están especialmente las del living y el comedor. Pero digno de atención es el caso del arreglo que hicieran en la pieza de mis viejos que quedó a medio camino y así ha permanecido por mucho tiempo (un maestro tenía que hacer unas instalaciones eléctricas y rompió un trozo de la muralla y dijo que la repararía en el corto tiempo, pero cobró lo del enchufe y nunca volvió y el piquete sigue ahí).
Todos estos ejemplos de deterioro y dejo son el reflejo de mi familia, es decir, todo funciona a medias (o de plano, no funciona muy bien), igual que los componentes de la casa, y nadie se preocupa por arreglar, cambiar o mejorar lo que está fallando. Quizás las cosas sigan así hasta que la casa se caiga a pedazos o hasta que la familia se descomponga. Ya veremos qué sucede primero.



(2004)